Amado Clínica Pediátrica

¡Que viene la bronquiolitis!

En invierno solemos asistir todos los años a “epidemias” de bronquiolitis. Pero… ¿qué es eso de la bronquiolitis?

– Es un tipo de infección (por tanto se contagia entre los niños) que suele afectar a lactantes (niños de menos de 2 años).

– El culpable suele ser un virus (el famoso VRS o “virus respiratorio sincitial”), por lo que desgraciadamente los antibióticos no sirven de nada. Hay otros virus que también pueden causarla, pero el más frecuente es este.

– Este virus afecta a los “bronquiolos”, de ahí viene su nombre. Los bronquiolos son como unos bronquios muy pequeñitos al final de los pulmones.

– Lo que hace es “obstruir” parcialmente esos bronquiolos. Al obstruirlos, el aire no pasa y se genera el famoso “pitido” que tienen estos niños. A los bebés les cuesta respirar, tosen mucho, dejan de comer…

 

¿Qué hacemos entonces?

– Lo primero es diagnosticar la bronquiolitis. Con frecuencia se confunde con un catarro común (de hecho, los primeros días no se escucha el pitido). Si tu niño de menos de 2 años tiene un catarro, y empeora en 2-3 días, es necesario volver a la consulta para auscultarlo, porque puede ser que tenga una bronquiolitis. La única forma de poder diagnosticar una bronquiolitis es a través de la auscultación.

– Lo segundo es confirmar que tipo de virus la ha causado. En nuestra clínica contamos con tests de diagnóstico rápido (se realizan con una muestra de moco del niño y los resultados los tenemos en 10 minutos) para detectar el VRS (virus respiratorio sincitial).

– Lo tercero es poner un tratamiento adecuado en función de la edad. En niños de más de 6 meses pueden ser útiles los broncodilatadores (salbutamol) administrados mediante cámara de inhalación. En niños de menos de 6 meses estos medicamentos pueden no ser efectivos, y tendremos que utilizar otras opciones.

 

¿Qué pasa después?

– Después de una bronquiolitis, esos bronquiolos de los que hablábamos pueden quedar “sensibles”, y con cada catarro (aunque no sea una bronquiolitis) pueden volver a cerrarse de nuevo. Tendremos que utilizar de nuevo el salbutamol con la cámara. Esta condición se denomina “sibilancias recurrentes” o “hiperreactividad bronquial”, y es una secuela de la bronquiolitis. Afortunadamente, existen medicamentos preventivos, para intentar no tener que utilizar el salbutamol con cada catarro.

 

¿Cómo la puedo prevenir?

– La única medida que puede ayudar a que el virus no se propague es el lavado de manos frecuente.

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